En nuestra última Clínica de Práctica de Coaching Organizacional, surgió la pertinencia de distinguir con nuestro coacheado entre emprendedores y empresarios.
Sin embargo, podemos hacer dos movimientos adicionales que pueden sumar:
1. Mostrar la oportunidad de pasar desde los sustantivos (emprendedores o empresarios) hacia los verbos (emprender o empresariar) para movernos desde los conceptos hacia las distinciones de lo que alguien hace o no hace.
2. Comprender estos verbos como campos emocionales que dejan disponibles algunas acciones particulares y no otras.
De este modo nos podemos preguntar: ¿Para qué acciones quedamos disponibles cuando moramos en una y otra emocionalidad? Van algunos ejemplos
Desde ya que un campo emocional no resulta mejor que el otro y, más allá que la opinión de los coaches no importa, el contar con la distinción para observar desde estos dos campos emocionales diferentes nos permitirá acompañar con mayor efectividad a nuestros coacheados, para que encuentren su propio lugar desde donde plantearse el futuro.
¿Está resultando adecuado tu emocionar a la hora de encarar tu futuro?
Si requerís acompañamiento para abordar este tipo de desafíos, tal vez nuestro enfoque te resulte una oportunidad.
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